4 de noviembre de 2012

A saber



Besé el miedo cuando estaba a punto de desbocarse por mis manos temblorosas y frías. Desde la ventana podía notar como a mis espaldas la nostalgia inundaba cada rincón de la habitación, exactamente igual que tu olor cada vez que entrabas a ella. Nunca te enseñaron que a las teclas del piano no hay que aporrearlas, sino comprenderlas. Mis recuerdos buscan un refugio eficaz antes de que llegue el Diciembre que los queme. Pero lo que no se sabe es que están fenixiados, vuelven a reaparecer cada vez que los hago cenizas. Y quizá no fuimos todo lo que nos hubiera gustado ser, pero al menos soñamos que luchábamos por nosotros mismos.
Y es que, a estas alturas, nunca vi odiar con tanta dulzura ni amar con tanto despotismo, a pesar de que sólo era una coraza en la que poder refugiar los complejos que nunca fui capaz de mostrar pero siempre tuve. No me llames si sabes que mis labios están silenciados para los tuyos. No me digas que chille sabiendo que mis ojos han visto un mundo diferente al que has visto tú.
Te aseguro que no sonreirías si vieras la culpa que aplasta nuestras espaldas mientras baila encima de estos omoplatos. Tanto amor sólo servía para poder encontrarnos con el tiempo y decir 'Esa cara me resulta familiar' de manera que camufle nuestro 'Esa cara me jodió la vida'. La conciencia está exprimiendo cada parte de nuestra cabeza con intenciones de sacar aquellas respuestas que nunca supe dar porque simplemente nunca tuve.
Y yo soy yo, pero tú a saber qué eres en estos momentos.

http://soundcloud.com/sloamadriz

Sloa.

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